jueves, 1 de enero de 2009

Cuentito de año nuevO

Nunca imaginó pasar un año nuevo o un fin de año (depende de cómo lo quieran ver) como el que pasó esta vez. Fue diferente, mágico…especial. Con esto borró muchas cosas, muchos errores, muchas lágrimas. Con esto le dio una nueva esperanza a la confianza ajena y le dio un respiro al corazón. La misma gente, el mismo lugar, la misma música, la misma vida, el mismo respiro…sin embargo no era igual. Había algo, algo que hacía que todo se vea de diferente manera. Como un tibio matiz de amor que hacía ver todo más tenue, ya no eran las mismas luces brillantes y enseguecedoras del año pasado, que, por su misma naturaleza no la dejaron ver bien y tropezó. Ya no eran las mismas luces que la llevaron al fondo del abismo donde golpeó más que su físico, también su orgullo, su dignidad, su alma y corazón.
Fue un precio justo el q pago pues hizo mucho daño. Se vengó el orgullo, la dignidad, alma y corazón del otro. Con esto se vengó un año de sufrimiento un año en donde la confianza se había escondido, el respeto se fue a pasear sin pedir permiso y el razonamiento se fue de vacaciones y no dijo adonde. Nadie sabía dónde estaban y por más intentos de encontrarlos no se podían hallar. Sin ellos no podía funcionar y no lo hizo…se fue destruyendo cada vez más y más y más hasta tocar fondo.
Pero al despertar esta mañana su dolor y el dolor ajeno desaparecieron. Se fueron con el 2008, junto con la venganza justa y todos los errores. Al despertar y verlo a su lado sintió que todo iba a ser diferente, que todo era posible. Sintió que la confianza salió de su escondite, el respeto regresó y pidió perdón por haberse ido de esa manera; el razonamiento regreso relajado y con más ganas de trabajar.

Fin


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